lunes, octubre 06, 2008

Breviario de podredumbre

"Por separarnos de nuestros pesares, nuestro último recurso es el delirio; sujetos a sus desvíos, ya no volvemos a encontrar nuestras aflicciones: paralelos a nuestros dolores y al margen de nuestras tristezas, divagamos en una tiniebla saludable".

Desmond, aterrizado de Vietnam, en casa, con su traje recién planchado, pulcro y limpio como el suelo de un quirófano, pero por dentro de otro modo, en off, igual que la lengua de un camello, igual que una piñata mexicana, igual que Alí Farka Touré, igual que el swing malouche. Dentro, todo sonaba a guitarras y estaba inflado y se precipitaba por un embudo en bloques de monosacáridos bien envueltos en papel de cebolla. Vamos, como dice Cioran, divagaba en una tiniebla saludable, así que en una semana ya no llevaba ni cordones en las botas, ni se afeitaba, ni se lavaba y vestía una cazadora militar, en lugar de la impecable guerrera del cuerpo de marines, con sus chapas y sus galones. También llevaba un gorro de lana, era invierno y, aunque sociópata, estúpido no era.

Por Ignacio

1 comentario:

Tesi dijo...

Con el viruji que hace ahora, se aprecia el gorro.

Sigo sin cambiar de dieta, sigue siendo más bien vegetariana. Aunque no descarto un buen plato de carnaza. Algún día.

Bienvenida otra vez.